Abuelos, a la deriva

El tema reaparece en los medios de comunicación –en coincidencia con alguna denuncia- y se reinstala en la agenda pública, pero no alcanza una resolución. La necesaria normativa que regule la actividad de institutos geriátricos y gerontológicos sigue así demorándose. Desde hace tiempo, nadie les puede garantizar a las personas mayores que el lugar