Son padres, no técnicos o barras

Los vicios en el fútbol se mantienen, no es ninguna novedad. Allá por la década del ’80, cuando todavía vestía la casaca de Toritos de Chiclana y con algunos años nada más, eran moneda corriente. Hoy, casi 30 años después, continúan siendo algo habitual, común, que prácticamente forma parte del fútbol doméstico: los padres gritándoles a los chicos