ANÁLISIS repasó los aspectos más salientes de la investigación, que va permitiendo comprobar lo denunciado en enero por la nueva conducción de la entidad. Los fiscales Matilde Federik y Gervasio Labriola aguardan el resultado de una pericia contable que permitirá determinar el monto del perjuicio ocasionado, que es varias veces millonario. Luego, comenzarán a enviar a las citaciones a indagatoria a los imputados, que desfilarán por los estrados judiciales antes de la feria de julio. La pesquisa puso el foco también en la anómala situación que atraviesa la Dirección de Inspección de Personas Jurídicas de la provincia. La sustitución y falsificación de un acta, un organismo paralizado hace un mes y medio por reclamos de los trabajadores y un director que se tomó licencia y estaría en viaje a Europa son los principales elementos que podrían dar lugar a una investigación paralela.

L. D.

En la Biblioteca Popular del Paraná, en 1945, tuvo lugar la asamblea constitutiva del Círculo Médico de Paraná. Lo fundó un grupo amplio de profesionales, inspirados en la conformación de dos entidades predecesoras: la Confederación Médica de la República Argentina y la Sociedad Médica de Santa Fe. Casi 70 años más tarde, en una asamblea similar, en diciembre de 2014, quedó en evidencia una escandalosa realidad de irregularidades y fraudes en una entidad señera en la ciudad, que hoy es materia de investigación en Tribunales. Allí acudió el 2 de enero, en plena feria, la comisión directiva que asumió hace justamente un año y, desde entonces, intenta reconstruir el prestigio y las finanzas de la institución.

La denuncia fue suscripta por el presidente del Círculo Médico, Alfredo Angarola; el secretario general, Luis Ríos; y el tesorero, Eduardo Vesco. Un mes más tarde, a propuesta de sus abogados, Rosario Romero y Santiago Halle, fueron citados a prestar declaración testimonial por los fiscales Gervasio Labriola y Matilde Federik, en quienes recayó la causa. Lógicamente, los denunciantes ratificaron y ampliaron el contenido de la presentación.

En marzo, fueron imputados y citados a designar abogados defensores los diez acusados, en su mayoría miembros reconocidos de la corporación médica, algunos con apellidos ilustres, sobre los que pesan acusaciones de delitos como defraudación y falsificación de documentos, ambos con penas que llegan a los seis años de prisión, según establece el Código Penal.

Nada de ello obstó para que la causa avance con una saludable velocidad: también se tomó declaración a unos 30 testigos, entre empleados, ex empleados, contratistas y fiduciantes, entre otros. Falta una cantidad similar. Los testimonios de los trabajadores de la entidad de mayor antigüedad fueron considerados “jugosos” en los pasillos de Tribunales.

(Más información en la edición número 1058 de la revista ANALISIS del jueves 11 de mayo de 2017)