Juan Cruz Varela
La escena se repite una vez más, como tantas en lo que va del año: el hallazgo casual de droga como consecuencia de un operativo de control vehicular de rutina dispuesto en una ruta que atraviesa la provincia y con la ayuda de perros adiestrados.
Solo que esta vez el protagonista era alguien más que una simple mula.
El episodio tuvo amplia cobertura en los medios: el viernes anterior a las elecciones, policías de la Dirección de Prevención y Seguridad Vial que realizaban un procedimiento rutinario de control vehicular y documentológico en el puesto caminero de San Jaime de la Frontera, sobre la Ruta Nacional 127, detuvieron un automóvil que llevaba 207 ladrillos de marihuana de distinto peso y tamaños ocultos en distintas partes de la carrocería. El conductor del vehículo era un ex policía exonerado de la fuerza en 2002 a raíz de que había sido condenado por un homicidio.
Pero hubo un dato que se mantuvo en absoluta reserva: otra vez era un chofer oficial quien transportaba la marihuana. Según pudo determinar ANÁLISIS, Pablo Oscar Jaime, paranaense de 48 años, que conducía el monovolumen donde estaba oculta la droga, cubría suplencias como chofer de la ambulancia del Hospital Domagk desde finales de 2011.
(Más información en la edición gráfica número 1033 de ANALISIS del jueves 19 de noviembre de 2015)