A. M.
Los primeros 90 minutos se jugaron en cancha de La V Azulada y el triunfo fue para la visita. El segundo tiempo, extendido, se trasladó hasta Arroyito y lo que se vivió allí no fue apto para enfermos cardíacos. Es que Arsenal descorchaba, estaba todo dado para que diera la vuelta olímpica ante su gente, pero el fútbol siempre tiene preparada alguna sorpresa.
Y fue lo que sucedió, porque en un parpadeo, Viale FBC dio vuelta el marcador y terminó festejando. En 120 segundos la visita hizo lo que pocos esperaban gracias a la aparición de Antonio Todoro. El Toni anotó dos goles en el tiempo adicional y todo se trasladó a un tercer cotejo.
La sede para el duelo final fue la cancha de Atlético María Grande. Hasta ese reducto se trasladó prácticamente un pueblo entero para alentar a los dos equipos. Todo estaba dado para que fuera una final histórica, y no defraudó.
En los 90 minutos reglamentarios no se sacaron ventajas. Igualaron 1 a 1.
Parecía que todo estaba predestinado para que el campeón 2010 se hiciera esperar. Llegó el alargue, pasó poco y nada, hasta que se llegó a los penales. Allí los pateadores de Arsenal fueron más fríos. Además, contaron con la estupenda intuición del arquero Lucas Rodríguez, quien mucho tuvo que ver para que su equipo diera la segunda vuelta olímpica de su historia.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)