Hugo Remedi

-¿Renunciaste o te echaron?
-No, no, yo renuncié. Tengo el acta de renuncia que en su momento le mandé tanto al ministro (Adán) Bahl como al gobernador.

-¿Por qué lo hiciste, si Sergio Urribarri dijo que no te echó?
-El motivo de mi renuncia concretamente responde a cómo se manejó, a mi entender de un modo desprolijo, la designación de Aníbal Brugna como secretario de Trabajo.

-¿Cómo te enterás de la designación de Brugna?
-Por los medios. Yo estaba en Córdoba en una reunión con el secretario de Trabajo de esa provincia, en ese momento me entran a llamar los medios preguntándome sobre la designación de Brugna, que yo desconocía. El día miércoles viajo a Córdoba, las autoridades del gobierno lo sabían, incluso tuve contacto telefónico al mediodía y no me dijeron nada de la asunción de Brugna. Y más tarde me entero por los medios, lo cual me irritó mucho dado que hacía siete años que venía trabajando en el área de Trabajo, he dado todo para que funcione bien.

-¿Estamos hablando del miércoles día anterior a la asunción oficial?
-Exactamente.

-A propósito, ¿te sorprendió la designación de Brugna?
-Me sorprendió en el sentido de que yo no esperaba que lo hiciera de esta manera como lo hizo el gobierno, de un día para el otro. Si a mí me hubieran llamado 10 días antes o una semana antes, y me decían ‘mirá, se lo va a poner a Brugna porque el gobernador lo decidió de esa manera’, yo no hubiera tenido ningún problema, siempre y cuando se me hubiese comunicado como corresponde.

-¿A qué respondió esta movida?
-Considero que esto se debe a un manejo de un grupo minúsculo de entidades sindicales donde ellos estaban fogoneando esto. Porque ya en una reunión que habían tenido con el gobernador y el ministro de Gobierno un dirigente sindical como el de camioneros salió a decir que ya la etapa de Balla en la Dirección de Trabajo estaba cumplida. Estamos hablando de hace más de dos meses. Después fue cambiando sus dichos, después dijo que yo estaba del otro lado o que yo no estaba dentro del modelo de Urribarri, a medida que iba hablando iba cambiando sus dichos. Entonces yo consideré que si venía de una reunión con el gobernador y con el ministro seguramente ellos sabían de lo que estaba hablando este dirigente gremial. No quiero poner palos en la rueda, si ellos tienen algo que modificar de la Dirección Provincial de Trabajo que lo hagan y yo les dejo el camino libre. Insisto, me quedó un sabor amargo de cómo se manejó la designación.

(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)