Federico Malvasio
Todo empezó en 1993. Aquel año el gobierno de Entre Ríos recibió de la Nación un subsidio para montar un Centro Preventivo Asistencial Integral específico de la drogodependencia en Paraná, que iba a ser el primero de esas características en la provincia.
El gobierno de Mario Moine suscribió un convenio con la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar) y este organismo le otorgó a la provincia un apoyo económico de 103.000 pesos/dólares para llevar adelante la iniciativa. El emprendimiento se realizaría mediante una ampliación del Centro Huellas.
En el convenio aludido se determinó la manera de utilización de los fondos otorgados, la oportunidad, la forma en que debían ser administrados y también los elementos y la documentación que certificarían la inversión de los mismos y el cumplimiento de la finalidad del dinero.
Los años y los dirigentes pasaron. No sólo los moinistas, sino también los montielistas y los bustistas. El 16 de febrero de 2004 comenzó un periplo que aún no se ha resuelto. Desde la Nación hicieron saber al gobierno provincial que no había cumplido con aquel convenio, ya que Entre Ríos “no habría usado debidamente los fondos otorgados”, según se lee en el expediente al que tuvo acceso ANALISIS. En rigor, la provincia envió documentación pretendiendo rendir cuentas de los fondos invertidos, pero tales no concordaban con lo establecido en el acuerdo. Es así que desde Sedronar iniciaron las acciones civiles pertinentes ante el Juzgado Nacional Civil y Comercial Federal, Secretaría 4º. Luego, por cuestiones de competencia, el caso pasó a la Corte Suprema de Justicia de la Nación, donde aún se tramita. La causa, para lograr la devolución de 78.043, 52 pesos, está caratulada: “Sedronar c/ provincia de Entre Ríos s/ de sumas de dineros”.
Contrapropuesta
La provincia, una vez conocida la intimación del organismo nacional, actuó en consecuencia. Fue el Ministerio de Salud y Acción Social el que tomó cartas en el asunto. La idea consistía en armar un proyecto con el fin de subsanar la irregularidad en la que se había incurrido. Fue así que se decidió confeccionar un nuevo convenio para que lo firmaran la Secretaría de Estado y el gobierno provincial y de esa manera llevar a cabo lo que no se había hecho en su momento: un Hospital de Día.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)
