Álvaro Moreyra
El entrerriano Paolo Goltz es el capitán del Huracán subcampeón del reciente Torneo Clausura de Primera División. Con tan sólo 24 años, el defensor nacido en la localidad de Hasenkamp es uno de los referentes del Globo y a pesar del paso de los días continúa con bronca por el pésimo arbitraje de Gabriel Brazenas en la definición ante Vélez (derrota 1-0). A pesar de esto, el futbolista rescató cosas positivas del segundo puesto y se ilusiona con que se mantenga la base para el certamen que se avecina. Además, el zaguero central sueña con el llamado de Diego Armando Maradona para formar parte del seleccionado argentino conformado por jugadores del campeonato afista.
El campeón moral. El mejor equipo del año. Los amos del ticki ticki. En fin, solamente tres de las cientos de expresiones que se usaron para describir al Huracán, subcampeón del Torneo Clausura de Primera División. Pero de poco sirve, porque mucha desazón y bronca quedó en el plantel de Parque Patricios tras lo sucedido el domingo en el Estadio José Amalfitani. Es que el árbitro Gabriel Brazenas se encargó de empañar una verdadera fiesta. De amargarle la tarde a un pueblo que tiene el grito atragantado desde 1973. De desilusionar a muchos pibes con pocos partidos en la elite del fútbol argentino y tenían ganas de dar la vuelta olímpica.
Es que el juez fue clave para la victoria 1 a 0 de Vélez sobre El Globo. A saber: le anuló mal un gol a Eduardo Domínguez, no le cobró un penal claro al equipo a la postre campeón y la frutilla fue que en el tanto de Maximiliano Moralez hubo falta al arquero Monzón. Así, el equipo velezano festejó tras cuatro años de sequías, quizás no de la manera que lo merecía.
Pero El Fortín no logró contagiar al hincha del fútbol, a ese que cuando su equipo no pelea por cosas importantes se encariña con el más débil o bien con el que mejor juega. Eso lo logró Huracán. El equipo de Parque Patricios tuvo un gran semestre y mostró en cancha el fútbol que le gusta al argentino. Pelota al piso, mucho toque, gambetas y lujos de los trascendentes, y además goles de todos los calibres. Adelante mostró buen juego y al mismo tiempo tuvo una defensa sólida.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)
