Álvaro Moreyra
En agosto comenzó un nuevo ciclo en la Unión Entrerriana de Rugby (UER). Tras la sorpresiva renuncia del entrenador Alejandro Chicho Nogués, la dirigencia decidió dar un golpe de timón y contratar a Emiliano Bergamaschi, que no mostraba pergaminos en la conducción de clubes, menos aún de selecciones, pero en su experiencia como jugador había exhibido sus cualidades, no solamente en el rugby paranaense sino también en el rosarino y se dio el lujo de jugar en Inglaterra y Francia.
Fue importante la apuesta realizada por la UER y la jugada le salió de manera perfecta, porque los resultados comenzaron a aparecer mucho antes de lo pensado.
Por aquel entonces, el ex pilar de Estudiantes y Atlético del Rosario en la Argentina y actual head coach de Entre Ríos le decía a este semanario que “el primer objetivo será el Campeonato Argentino Juvenil, aunque nuestro principal objetivo será regresar a Entre Ríos a los primeros planos del rugby nacional”.
Y vaya si se logró, en su primera incursión como entrenador al mando del representativo entrerriano, se consiguió el ascenso a la Zona Campeonato del Campeonato Argentino de Menores de 19 años. Histórico por cierto el logro de los juveniles, que la temporada venidera se codearán con los mejores seleccionados del país en la categoría: Buenos Aires, Rosario, Córdoba y Tucumán serán algunos de los escollos para estos chicos que tienen un futuro enorme.
El Campeonato Argentino tiene una particularidad y es la inmediatez con la que se juegan los partidos. Cada siete días los equipos saltan a la cancha y se juegan solamente partidos de ida, por denominarlo de alguna manera. Vale decir, perdés un partido y prácticamente te despedís hasta el año entrante. A partir de esto es que el logro de los chicos de la UER toma mayores ribetes, porque no solamente ganaron todos los partidos, sino que tres de los cuatro los jugaron en calidad de visitante.
El camino comenzó con una resonante victoria ante Santa Fe por 11 a 10, posteriormente visitaron a Noreste y lo vencieron 21 a 8. En la tercera fecha, la única jugada en Paraná, vencieron sin mayores complicaciones a Santiago del Estero 47 a 14. La fase clasificatoria no tuvo fisuras y el primer lugar en el grupo lo catapultó a jugar la final.
El fin de semana visitaron tierras sanjuaninas y en un partido no apto para cardíacos, la UER venció a los locales 19 a 11. Fue un choque por demás complicado pero, con más corazón y garra que rugby, lograron sacar adelante y festejar durante muchas horas.
Esa final ante San Juan tuvo un jugador destacado, el medio scrum de Estudiantes Juan Manuel Lescano, que apoyó los tres tries de Entre Ríos y además condujo desde su capacidad e inteligencia a sus compañeros siempre hacia delante.
Juanma tiene apenas 17 años y vivió una temporada estupenda. El jugador de Estudiantes no solamente logró el ascenso con la UER sino que además en el mes de agosto tuvo el privilegio de calzarse la camiseta de la selección argentina juvenil, conocida como Los Pumitas.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)
