Silvio Méndez
Luego de haberse postergado en dos oportunidades, se reunió nuevamente la Mesa de Transporte municipal. En esta ocasión, en el organismo integrado por funcionarios municipales y representantes de los bloques legislativos del Concejo Deliberante se recibió a los representantes de los taxistas, que demandan un aumento en las tarifas. Si bien se adelantó que no se daría lugar al planteo, se estudiaría una respuesta para dentro de 10 días. A su vez, representantes de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), institución a la que se le encargó un estudio para la reestructuración del tránsito en la ciudad, dieron a conocer que el diagnóstico podría llegar a estar listo a fin de 2008. Como se recordará, oficialmente se adelantó que la investigación iba a estar para agosto del corriente, con el fin de poner avanzar en un reordenamiento vehicular general. Por otro lado, desde la oposición se pidió ampliar la convocatoria para el debate sobre estos temas.
Los usuarios del transporte público de pasajeros –el de colectivos en particular– pueden esperar tranquilos. Bien tranquilos, en esas garitas que se caen a pedazos y que no pueden guarecer ni tan siquiera una débil garúa. Pueden esperar tranquilos, porque la frecuencia con la que pasan los ómnibus es más bien prolongada y azarosa, sobre todo los fines de semana. Además, si es por esperar, pueden aguardar que algún día sean todas unidades nuevas, con colores, números, carteles y recorridos claros, definidos y, ni qué hablar, tengan expendedoras de boletos que den el vuelto en monedas. O en otro caso, esperanza sobra para que algún día haya coches equipados para que personas con discapacidades motrices puedan hacer uso de este tipo de movilidad, tal como los que fueron incorporados hace pocos días en la vecina ciudad de Santa Fe.
Pueden esperar porque resulta que este problema, entre otros que aquejan al tránsito en la ciudad, está lejos de resolverse en lo inmediato. Según ya se adelantó a las autoridades municipales, el estudio para reestructurar el tráfico en Paraná encargado a la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) llevará más tiempo de lo anunciado. De acuerdo a lo proyectado, para los primeros días de agosto estaba prevista una primera etapa de diagnóstico, pero este análisis estaría recién a fines de este año. Según lo expresaron las autoridades comunales del área, se esperaría este informe para encarar las soluciones de fondo que el complejo sistema demanda.
En tanto, el martes de esta semana, luego de que se viera frustrada en dos oportunidades la convocatoria, se reunió la Mesa de Transporte municipal. En esta ocasión, el tema central que se abordó fue el pedido de aumento de las tarifas de taxis. Representantes del sector solicitaron que el costo por bajada de bandera sea de 2,90 pesos y 0,16 la ficha. Si bien el secretario de Tránsito y Transporte de la Municipalidad, Marcelo Baridón, adelantó antes de comenzar la reunión que la petición sería desestimada, los funcionarios se comprometieron a dar una respuesta en 10 días.
Tal parece que la moción correría igual suerte que el desvergonzado reclamo por incremento del boleto de colectivos. Los argumentos que se esgrimieron fueron asimismo que los planteos debían adecuarse a la situación económica financiera de la ciudadanía como el esperado estudio de la UTN sobre la situación global para encarar seriamente reformas y modificaciones que puedan optimizar el tránsito urbano.
En la reunión de principios de semana, el subsecretario de la Gestión Pública de la comuna, Juan Enrique Ríos, explicó que los taxistas sostuvieron su postura en base a tomar como ejemplo “el aumento de la tarifa de Capital Federal y Rosario y elevaron un pedido de aumento.
Quedamos en analizar la solicitud con las áreas competentes a través de la fórmula polinómica que se aplica en estos casos”, indicó. Por otra parte, Ríos informó que se habló del sistema de estacionamiento medido. “Se hizo un informe en el que se evidencia una muy baja recaudación, que alcanza sólo al 10 por ciento y que complica la puesta en marcha del boleto estudiantil. Por eso se manejan varias alternativas para mejorar el sistema que será analizado en otra reunión”, adelantó.
Si bien los funcionarios, concejales de la oposición y, en este caso, taximetreros se mostraron conformes con este tipo de encuentros en que se abre una posibilidad de discutir temas inherentes al sector, el concejal Emanuel Martínez Garbino (Concertación Entrerriana) señaló la necesidad de poder abrir aún más la participación a esta mesa a los actores interesados.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)
