F. P.
Avanzado el nuevo año, las revistas comienzan a salir de las imprentas. El Colectivo, de tirada bimestral, lanzó a las calles el número 13, mientras que Telaraña, mensual, ofrece el número 9.
Ambas propuestas editoriales se detienen, desde sus miradas, ante la tierra que habitan, ensayando análisis y denuncias sobre lo que ven, sienten y quieren.
Desde El Colectivo, la nota de tapa anuncia “Otra ciudad para otros hombres”, en la que Gilda García une palabras claves como biohabitalidad, pertenencia e identidad. “Repensar sus espacios y tiempos (de la ciudad), equilibrios y desequilibrios, también significa repensarnos a nosotros mismos, quienes la vivimos y transitamos a diario. Más allá de negocios para unos pocos, dobles discursos y cortes de cintas electoralistas”. Con opiniones de Daniela Verzeñassi, arquitecta e integrante del Foro Ecologista de Paraná, la autora recorre la ciudad desde lo urbano y ambiental.
En Telaraña, la observación se desplaza a lo rural donde se encuentran a una mujer que se brota de sólo pisar el campo, a otra que vive con una máscara y a un médico que escracha a los responsables. “Envenenados” es la nota de tapa que anuncia que en lugares como Líbaros, Santa Anita, La Ollita y Basavilbaso hay gente que ya perdió el miedo, y cuenta cómo la soja y los agroquímicos destruyen día a día sus cuerpos.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)