-Candidatos secretos. Finalmente, luego de mantener en vilo al gobierno, el cronograma electoral que ordena el proceso político provincial parece encarrilado. Después de muchas vueltas y febriles negociaciones para garantizar la logística necesaria, se cumplió sin mayores novedades el primer paso de la presentación de listas. En definitiva, el proceso se va decantando como una simple formalidad que hace a la vida interna partidaria. Recordemos que las listas presentadas lo han sido hechas a título de precandidatos, es decir que son listas para competir en las internas partidarias fijadas para el 17 de diciembre. En ese sentido y teniendo en cuenta que como principio general a las leyes que reglamentan los procedimientos partidarios les rige el principio de prescindencia, que es como decir que deben ser respetuosas de las autonomías, los incidentes planteados en este tramo serán resueltos por las Juntas Electorales de los respectivos partidos. Cabe recordar que sólo en el PJ y en la UCR van a sonar tambores de guerra. Se puede suponer entonces que nada grave va a suceder. Si algún agrupamiento en particular se movió con la expectativa de agarrar mal parado a su contrincante virtual, la sucesión de los acontecimientos fue demostrando que había una media que atravesaba por igual, con debilidades y aciertos, a las respectivas propuestas. Si bien el oficialismo que propone -bajo el paraguas de la ya histórica Lista 2- a la fórmula Urribarri-Lauritto cumplió en tiempo y forma con la presentación, al correr de las horas tuvo que efectuar algunas correcciones porque le surgió un “grano” donde no lo esperaba. Es que el bustismo había llevado adelante una estrategia tendiente a saltear las contiendas internas. De esa manera, planeaba una campaña dirigida directamente al electorado independiente como principal objetivo de las generales de marzo. La presentación de más de una lista para diferentes categorías de candidatos en algunos departamentos colisionó con aquella estrategia y ahora algunos van a tener que transpirar en diciembre para asegurar su nombre en la boleta sabana de marzo. Eso fue lo que sucedió con la inesperada presentación como precandidato a senador del ex vicegobernador Héctor Alanis por el departamento Paraná. La interna “no querida” agarró mal parado al oficialismo ya que para colmo de males ese lugar se había otorgado a Juan Domingo Zacarías en calidad de acuerdo extrapartidario.

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-Aperturas. Entrando en los detalles finos de la propuesta oficial del justicialismo se puede observar que en los armados departamentales donde la disputa adquiere tensión, Jorge Busti y Sergio Urribarri han abierto el espacio a referencias locales con perfil propio. En el caso de Concordia, las novedades se centraron en la lista de concejales. Allí el bustismo mostró apertura y ductilidad para terminar conformando una lista con predominancia peronista, pero abierta a referencias derivadas de acuerdos extrapartidarios. Se destaca en el primer lugar de la misma a Ángel Giano, un reconocido abogado que fue piedra angular al frente de la Fiscalía de Estado municipal durante la gestión del intendente Hernán Orduna, y en estos años se ha ganado el respeto de distintos sectores con su tarea al frente del área de desarrollo de la CAFESG. En el caso del departamento Federación se evidencia que ha habido una fuerte retribución al intendente Juan Javier García, que va por la reelección en la Lista del Justicialismo Oficial. José Luis Panozzo, en la actualidad secretario de Gobierno en la Intendencia de Chajarí, disputa la senaduría en el departamento en la lista de Urribarri. La apuesta del intendente de Chajarí sin dudas es fuerte. Corre con la responsabilidad de disputar con un hombre de su riñón la senaduría del departamento que tradicionalmente ha sido representado por el radicalismo.

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-Corporaciones. Lógicamente que el oxígeno que significan nombres y estilos nuevos viene contrabalanceado -entre otras cosas- por el peso de las viejas corporaciones de siempre. Es indudable que Jorge Busti leyó con atención que el escenario electoral que se levantaba no era el originalmente provisto. Como sea, Julio Solanas logró una plataforma importante en los dos principales distritos electorales, Paraná y Concordia. Desde ahí que salpicó con aquellos matizadores la propuesta de manera de hacerla más permeable al gusto ciudadano. De todas formas, cuando destapa la lista de diputados provinciales el cerrojo corporativo aflora ceñido. José Allende secunda al propio Jorge Busti en la lista de diputados provinciales preanunciando un protagonismo decisivo en la futura Legislatura. No es una cuestión menor, cabe señalar que en la Legislatura actual Allende ha desempeñado un papel realmente definitivo en cuestiones clave. La reforma constitucional, el Régimen Jurídico Básico y todo lo que ha tenido que ver con el IOSPER, son algunos de los temas que fueron definidos por puño y letra del millonario mandamás de UPCN sin necesidad de haber aparecido jerarquizado en la lista.

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-No todo es color de rosas. Si bien en principio las huestes de Julio Solanas mantuvieron en secreto el armado de la propuesta electoral, los olores que salen de la cocina no despiertan apetito en el paladar de una sociedad deseosa de alternativas renovadoras. Entre Ríos es una provincia muy especial, entre otras cosas, por la distribución geográfica de sus habitantes. Conocer Entre Ríos en su paisaje es una experiencia fascinante. Conocer Entre Ríos en su topografía política es un patrimonio de artesanos experimentados. El justicialismo los tiene, tanto Busti como Urribarri son verdaderos baqueanos en los laberintos políticos de la provincia. Julio Solanas, su hermano Raúl Patricio y sus principales colaboradores no tienen oficio ni la experticia para trajinar la provincia con posibilidades de acumular. Seguramente en este tiempo en que Solanas le ha dedicado buena parte al recorrido provincial, le ha permitido conocer más la provincia que en la suma de toda su vida anterior. Con ese poco conocimiento del terreno provincial, estar concentrado en el armado político más general de la propuesta y teniendo además que atender las cuestiones cotidianas de una gestión municipal complicada, la construcción territorial de la propuesta electoral fue quedando en las manos del actual senador por San Salvador, Hugo Berthet. Éste es un caminador de aquellos y ha sabido tejer un entramado de relaciones fuertemente confiables pero casi todas de un solo color. Jugado en esta partida de enfrentar a Busti con la figura de Julio Solanas, Hugo Berthet sumó fichas de mucha potencia. Primero convenció al diputado Enrique Cresto de jugar la patriada y luego avanzó y sumó al propio Juan Carlos Cresto en la apuesta. En tributo a la inteligencia de Berthet es bueno considerar que tanto él como Julio Solanas consideraban que era fundamental sumar a Luis Leissa en la propuesta. Dueño de una lógica férrea, Berthet aseguraba que sumando a los tres distritos más importantes de la provincia, el resto caía por su propio peso. Tan confiado estaba en esta línea de trabajo que, en su intimidad, Berthet aseguraba que si Leissa se alineaba Lauritto se bajaba de la Vicegobernación. Pero pasan los días y Luis Leissa sigue atrapado en la candidatura fantasmal de Emilio Martínez Garbino.

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