Florencia Penna
“En el cine encontré la vida, sin exageraciones, anteponiendo siempre al hombre, que es la única medida de todas las cosas. Ahí estaba todo lo que había vivido. Y saber que un filme, tanto como una novela, una obra de teatro, el arte, en suma, no va a cambiar el mundo, pero sí el tuyo”.
Juan Carlos Arch, diario El Litoral, 26 de agosto de 2006
No era ningún secreto que Juan Carlos Arch sobrellevaba un cáncer que desde hace un par de años le venía sacando las energías y los kilos. Pero la noticia no dejó de sorprender y entristecer cuando se supo, el miércoles 27 de septiembre a la noche, de su partida.
Tenía 67 años, cuya mayoría los dedicó a su pasión por el arte cinematográfico: desde la realización, la docencia, la crítica, los medios, el cine club y el impulso a la actividad con la distribución y la exhibición de películas.
Se supo que hasta último momento trabajó preparando un documental y continuaba publicando sus reseñas y críticas de films en el vespertino El Litoral. Entre sus proyectos figuraban escribir un libro y proseguir con la docencia.
Hace poco menos de un año, el cineasta fue invitado a presentar su último documental, Abre el Helvético (2002), en el Círculo Médico de Paraná, en una actividad organizada por la Gestión Cultura del Banco Credicoop y Cultura Activa de la Secretaría de Extensión y Cultura de la Universidad de Entre Ríos. Allí se contaba cómo la comunidad de la colonia suiza Nueva Helvecia, en Uruguay, recuperó su único y legendario cine comprándolo en forma de cooperativa, ya que iba a ser rematado y demolido para dar lugar a un supermercado.
También en dicha sala paranaense se pudo ver Una vez la poesía, un documental sobre la obra literaria de dos artistas santafesinos entrañables como Fernando Birri y Gastón Gori, reflejando el espíritu de una época pasada en la que Santa Fe era el epicentro de la vanguardia cultural. Birri, justamente, fue uno de sus mentores, docente y amigo (de hecho era el vicepresidente de la Fundación Fernando Birri de Artes Multimediales, emplazada en la ex estación del ferrocarril General Bartolomé Mitre). Junto a José Agustín Mahieu, entre otros docentes del viejo Instituto de Cine (de donde egresó), contribuyeron a su formación y, se cuenta, se constituyeron en sus referentes.
Más recientemente, en junio, fue noticia la distinción que le hiciera la Federación Internacional de Cine Clubes (FICC) con el Premio Don Quijote, en el marco de la asamblea bianual de la entidad que se desarrolló en Matera, Italia. Este tributo fue el tercer galardón especial en 59 años de historia de la entidad, lo que significó un reconocimiento extraordinario y al margen de la habitual premiación que efectúa la FICC en festivales internacionales. Arch era el presidente de Cine Club Santa Fe (desde 1966) como así también de la Federación Argentina de Cine Clubes (desde 1988), además de secretario general para América Latina de la FICC. El galardón, que le tomó por sorpresa, fue recibido con especial afecto pues venía de especialistas de todo el mundo, que él conocía desde hacía años y que, consideraba, sabían de cine por haber trabajado incansablemente para su realización y difusión.
Hace casi dos semanas, el sábado 23 de septiembre, en un espacio dedicado a las producciones audiovisuales de Santa Fe, el canal Cable & Diario presentó el telefilme Música de Laura, dirigido y guionado por Arch en base a un texto de Carlos Catania. Estrenado en 1994, la historia cuenta el despertar existencial de una mujer que, al cumplir 50 años, se ve atravesada por las imposiciones sociales al haber cumplido con las formalidades impuestas en cada época de su vida sin preguntarse por qué.
(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)
