Enigma en pantalla grande

Edición: 
725
Misterio y dudas en la muerte del administrador del Cine Rex y ex empleado del Ejército, Carlos Scannapieco

Juan Cruz Varela

Hace una semana, la ciudad de Paraná se conmocionó con la noticia que daba cuenta del homicidio de Carlos Alberto Scannapieco, el hombre que estaba a cargo del Cine Rex desde su reapertura en julio pasado. Una gran incertidumbre rodea la causa, ya que son pocas las pistas que tienen los investigadores para encontrar un móvil. Cuando fue hallado, el hombre sólo vestía una bata, había sido estrangulado y su departamento estaba cerrado. La puerta de entrada no estaba forzada y adentro se encontró un juego de llaves, lo que lleva a pensar que conocía a su asesino. En medio de una profunda confusión, los pesquisas no descartan ninguna hipótesis: un ajuste de cuentas, un asesinato por encargo o un hecho relacionado con motivaciones pasionales, aunque todas muestran flaquezas; en tanto, sus allegados, insisten en abonar la idea del suicidio. Sin embargo, en las últimas horas cobró fuerza la posibilidad de que el crimen pueda tener motivaciones económicas. Según pudo determinar ANALISIS, Scannapieco también trabajaba para la Contaduría General del Ejército.

Carlos Alberto Scannapieco había nacido el 23 de julio de 1946. Desde hacía algunos meses estaba instalado en Paraná a cargo de la administración del Nuevo Teatro Cine Rex y aunque acababa de cumplir 60 años daba un aspecto mucho más joven. De contextura grande, abundante cabellera entre rubia y cana larga hasta los hombros, era un hombre pintón, jovial y con muchas energías puestas en el proyecto que llevaba adelante. Nada hacía presumir el final que encontró en la madrugada del viernes en un departamento céntrico de la capital entrerriana.

Habían pasado unos minutos de las 9 del penúltimo día de septiembre. La ciudad mostraba el letargo propio de un feriado. Telefónicamente, una voz masculina advirtió al personal de la Comisaría Primera que en el departamento A del primer piso del edificio ubicado en calle Cervantes 143 había una persona que yacía debajo de una mesa plástica, sólo cubierta por una bata. Al segundo llegaron los móviles policiales y enseguida el lugar estaba atestado de agentes. El departamento estaba cerrado y las llaves descansaban sobre un aparador, por lo que para ingresar hubo que hacerlo desde el cantón contiguo, a través de una ventana abierta. No había buena luminosidad, pero la escena lucía ordenada en el desorden propio que presenta cualquier vivienda. Sólo estaba el cuerpo del hombre y una carta en la que se daba cuenta de dificultades económicas y financieras, aunque con escasos detalles. Era un escenario de suicidio, no cabían otras posibilidades. Se dio aviso al juez de instrucción en turno y este convocó al médico forense para que lo certifique. Pero de repente todo dio un giro de 180 grados.

Al analizar la escena, el médico forense advirtió que se trataba de una muerte violenta, ya que el cuerpo de Scannapieco estaba boca abajo, debajo de la mesa plástica cuadrada blanca que oficiaba como escritorio y tenía golpes en distintas partes de la cabeza, sobre uno de sus ojos y en los pómulos, por lo que había dejado algunas pequeñas manchas de sangre en el piso. La autopsia terminó por confirmar lo que ya se sospechaba: el hombre había sido asesinado.

El médico forense Luis Moyano confirmó que “en la sala de autopsia se comprobó que se trataba de una muerte por estrangulamiento a lazo, lo que produjo una muerte por asfixia mecánica. Los hematomas que tenía en el cuello eran producto de una asfixia por estrangulamiento mediante un elemento externo, no pudieron haber sido causadas por él mismo. No hay margen de error, esta persona no se quitó la vida por sus propios medios”, enfatizó el profesional ante la consulta periodística una vez concluida la autopsia. Moyano acotó que la muerte se produjo entre seis y horas antes del hallazgo del cadáver.

A partir de ese momento, cambió la línea de investigación. El juez de Instrucción Ricardo González -que ese día subrogaba a Gustavo Maldonado, actualmente a cargo de la causa- decidió apartar a la Comisaría Primera y encomendar las pesquisas a la División Homicidios de la Policía de Entre Ríos. A las 17.50, el magistrado volvió a la escena del crimen, esta vez acompañado por los nuevos investigadores para recoger elementos que permitieran aportar claridad sobre el enigmático hecho. Se inventarió, selló, clausuró y precintó el departamento, se levantaron huellas dactilares y capilares, se dispuso realizar un análisis de las vísceras para establecer si el hombre había ingerido alguna sustancia y se ordenó una pericia caligráfica a la carta hallada sobre la mesa.

Muchas dudas, pocas certezas

Carlos Alberto Scannapieco se había instalado en julio pasado en Paraná. Sería el administrador del Nuevo Teatro Cine Rex, tras la reapertura por parte de un grupo porteño que también tiene salas de cine en Concordia, Capital Federal, San Luis y otros puntos del país. La cabeza de ese grupo son los hermanos Alfonso y Antonio Álvarez, primos de Scannapieco, quienes se iniciaron en la actividad durante el primer gobierno de Juan Domingo Perón, allá por la década de 1940, cuando su padre abrió una sala en plena calle Corrientes en Buenos Aires, donde actualmente está el Teatro General San Martín.

Los contactos para la explotación del Cine Rex se iniciaron a poco de su clausura definitiva, en los primeros meses del año. La inversión estimada para el acondicionamiento y reapertura de las salas orilló los 100.000 pesos, ya que hubo que colocar cintas reflexivas y antideslizantes, un sistema de señalización autónomo, matafuegos, luces autónomas de emergencia, pulido y plastificado del piso de madera, corrección del sistema de puertas, un sistema hidrante en el escenario, un sistema hidrante en el Fayer con mangueras de 25 metros y un sistema hidrante en la entrada. La capacidad de ocupación disminuyó de 1.000 a 450 personas (300 en sala y 150 en pullman), pero también se cambiaron la totalidad de las butacas. El 13 de julio, con la proyección de El Ratón Pérez, el cine reabrió sus puertas.

(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)

Deportes

Concordia presentará este viernes la tercera fecha del Turismo Nacional

En el autódromo Parque Ciudad de Concordia se realizará la actividad del TN este fin de semana.

El Rally Entrerriano presentó su temporada 2024

Autoridades, pilotos y navegantes participaron del lanzamiento del certamen que comenzará en Pronunciamiento el 20 y 21 de abril.

Instituto

Instituto y Argentinos jugarán el partido destacado de los dos de este jueves por la Copa de la Liga Profesional.

Tomás de Roca

Tomás de Rocamora le ganó a Olímpico y ahora deberá esperar hasta el sábado para saber si accede, o no, a los playoffs de la LFB.

Clásico

La primera fecha de la Divisional A tendrá el clásico Atlético Paraná-Patronato.

San José

Social y Deportivo San José perdió ante CEF de La Rioja y le dijo adiós a la Liga Argentina de Vóleibol.

Echagüe

Echagüe le ganó a Independiente de Santiago del Estero y recuperó la senda del triunfo.

Fútbol: Unión saboreaba la victoria, pero Lanús lo dejó con las ganas de festejar

El "Tatengue" tenía todo para ganarlo, pero el "Granate" se lo empató en el final.

Causa Vélez: Sebastián Sosa recuperó la libertad tras pagar la caución

El arquero uruguayo pagó 50 millones de pesos para quedar en libertad a la espera de la resolución del caso.

Opinión

Por Héctor Helman (*)
Por Azul Martínez (*)  

(Foto ilustrativa)

Por Hugo Remedi (De ANÁLISIS)
Por Coni Cherep (*)  

(Imagen: conicherep.com)

Por Daniel Tirso Fiorotto (*)  

(Foto ilustrativa)

Locales

La intendenta de Paraná, Rosario Romero, se manifestó preocupada por la situación del transporte público, los servicios como el agua potable y las realidades hirientes por la falta de alimentos en muchos hogares.

La intendenta de Paraná, Rosario Romero, se manifestó preocupada por la situación del transporte público, los servicios como el agua potable y las realidades hirientes por la falta de alimentos en muchos hogares.

Interés general

Los robos son incesantes y genera pérdidas importantes y un daño muchas veces casi irreparable: el sentir la desconfianza y la inseguridad.

Los robos son incesantes y genera pérdidas importantes y un daño muchas veces casi irreparable: el sentir la desconfianza y la inseguridad.

La mala distribución de la tierra o, dicho de otra forma, la concentración al extremo, no es nueva en Entre Ríos. Y es un debate que será necesario dar en algún momento.

La mala distribución de la tierra o, dicho de otra forma, la concentración al extremo, no es nueva en Entre Ríos. Y es un debate que será necesario dar en algún momento.