El Mustang del entrerriano Mariano Werner, en boxes (Foto: ACTC).
El paranaense Mariano Werner mencionó que su apuesta por los autos de nueva generación, puntualmente el Ford Mustang, requiere de más pruebas para alcanzar el rendimiento deseado y qué sucedería con los rivales que tarden en dar el paso a los coches nuevos de la ACTC.
“Hasta que no probemos no vamos a estar al ciento por ciento, porque todavía no tenemos el conocimiento para una pista como La Pampa o Rafaela. Cuando lo descubramos y vayamos al kilómetro, ahí vamos a saber para qué está Werner”, advirtió el tres veces campeón del Turismo Carretera.
“Depende de los conjuntos y cuánto se cambia de los modelos nuevos. Yo creo que los que se cambien en el transcurso del año no se les va a hacer sencillo. No es lo mismo trabajar en un auto y estar trabajando en otro. El desarrollo, la ingeniería, el trabajo, los mecánicos… No es fácil sacarles punta a todos los lápices; siempre hay algo que no te queda bien”, advirtió sobre el cambio de un modelo a otro en una misma temporada.
Por otra parte, el entrerriano reconoció que muchas personas se acercan a boxes para observar de cerca su Mustang. “No sé si por facha, por la pintura, por el diseño…”, expresó en diálogo con Campeones.
Por último, contó que le costó convencer a sus mecánicos para dedicarse en el nuevo modelo. “Me pasó algo muy loco. Marcelo (Occhionero) me decía: hay que cambiar, hay que cambiar. Teníamos el Mustang nuevo con todos los elementos y el Ford de (Rodrigo) Lugón al lado, y lo único que cambiaba era el caparazón del auto, pero decía esto es otra cosa. A los mecánicos los tenía que empujar al nuevo auto, porque todos se querían venir a trabajar al otro”, contó entre risas.