El Banco Central desplegó medidas para morigerar la disparada de la divisa.
En una jornada signada por la incertidumbre y el nerviosismo local tras el aplastante triunfo de la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández de Kirchner (Frente de Todos) el domingo en las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), el dólar escaló 23% o $10,75 a $57,30 en bancos y agencias de la city porteña, según el promedio de Ámbito.
Sucedió en una rueda en la que el Banco Central desplegó toda su artillería para morigerar la disparada, con venta de reservas propias (por primera vez desde septiembre de 2018), intervención en futuros y con una tasa récord de 74,752%.
En el Banco Nación, en tanto, el dólar se vendió a $55 (en el canal electrónico se consiguió a $54,95). Mientras que la cotización más elevada del día la tuvo el Banco ICBC con un precio de venta de $66 (finalmente cerró a $57).
Se dio en sintonía con el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), donde la divisa voló y se vendió a $53 (un alza de 17,1% o $7,75), luego de alcanzar un récord intradiario de $65.
Para evitar que el dólar siga escalando, el Banco Central subió la tasa de referencia unos 11 puntos porcentuales al récord de 74,782%, y licitó u$s100 millones de sus reservas en dos tramos. En el primero, el precio promedio fue de $55,431, yen el segundo se registró un precio promedio de venta de $54,755.
Asimismo, el BCRA subastó otros u$s30 millones a cuenta del Tesoro. De esta manera, la autoridad monetaria busca abastecer la demanda del mercado luego de una derrota del oficialismo en la elección primaria del domingo.
Los valores máximos de la jornada se anotaron en la primera parte del día, cuando puntuales operaciones se pactaron en los $ 60, un aumento de catorce pesos setenta y cinco centavos respecto del cierre anterior. En ese marco, la poca oferta genuina fue suplida desde temprano por las intervenciones oficiales, que a las reiteradas ventas en los mercados de futuros, añadió la realización de subastas por cuenta propia con ventas en el segmento de contado que, sumadas a la fuerte suba de la tasa de interés de las Leliq, forzaron una baja de los precios hasta que tocaron mínimos en los $ 53.
El volumen operado fue de u$s550 millones, un 37% menos que el viernes ante la consecuencia de la incertidumbre y de la volatilidad de los precios.