Tal como lo anunció Germán Martínez, jefe de bancada de Unión por la Patria, en el plenario que dictaminó la ley Bases, el principal bloque de la oposición en Diputados presentó un pedido para llevar a cabo una sesión especial con el fin de tratar el DNU 70/2023 que ya cuenta desde el 14 de marzo pasado con el rechazo del Senado.
Eso ya sería un dato en sí mismo. Pero la “picardía” está en la fecha elegida por UP: el próximo martes 30 de abril, a las 11. Esto es, cuando se descuenta estará transcurriendo la maratónica sesión pedida por el oficialismo para debatir la ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, y la de Medidas Fiscales y Paleativas y Relevantes. Esa sesión arrancará el lunes 29 a las 12 y todavía no se ha resuelto si se pedirá un cuarto intermedio en algún momento de la jornada para continuar al día siguiente el debate. Lo seguro es que se extenderá a lo largo del lunes y buena parte del martes.
El pedido lleva la firma de casi el 90% de los legisladores del bloque a excepción de los diputados nacionales Máximo Kirchner; la massista Marcela Passo; y el santafesino Roberto Mirabella; y el jujeño Guillermo Snopek, entre otros.
Para muchos, la movida tiene por objeto obstaculizar la sesión de la sesión de Bases y paquete fiscal. La pregunta del millón es cómo se procederá en esas circunstancias. En principio, el presidente de la Cámara, Martín Menem, debe conceder el pedido solicitado por los diputados opositores. Según expresó una fuente legislativa consultada por parlamentario.com, el titular del Cuerpo tiene la facultad de “ordenar” las sesiones. De tal manera, si como todo indica la sesión del lunes 29 continúa al día siguiente para la hora pedida por la oposición, la misma se correrá para para el final de la misma. Y si hay quórum, se hará a continuación de la sesión original. Sino, serán expresiones en minoría, publicó Parlamentario.
Lo más probable en ese caso, cuando tal vez suceda en la madrugada del miércoles, 1° de mayo, Día de los Trabajadores.
Desde el día del rechazo en la Cámara alta, los legisladores de UP habían anunciado que harían uso del pedido de sesión para “rechazar el decreto” cuando tuviesen aseguradas las 129 acepciones necesarias para lograrlo. Sin embargo, a pesar de que diputados de otros bloques habían manifestado su intención de rechazo, el destino del DNU es una incógnita.