Tras conocerse los índices de pobreza y desocupación del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), el intendente de Concordia, Enrique Cresto, analizó la situación que se vive en su ciudad.

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Cresto señaló que “el problema de Concordia no es la desocupación, el problema es la pobreza” y al respecto explicó que “en las últimas mediciones la desocupación estuvo por debajo de Paraná; en Concordia la desocupación no llega al 10% y la pobreza supera el 50, lo que significa que hay más de un 40% que trabajando es pobre”.

Explicitó que “esto es consecuencia de este modelo económico y cada vez que tenemos un gobierno que centraliza el mercado, que destruye la industria y las fuentes de trabajo o que aumenta la canasta básica –que hoy está en más de 30.00 pesos-, ciudades como Concordia que tienen miles y miles de personas de la población económicamente activa que tiene salarios por debajo de la canasta básica; es un problema de la economía nacional y de esta política que ha destruido todo”.

Agregó que “de los 31 conglomerados que mide el INDEC, hay más de 20 capitales de provincia y otras ocho o nueve ciudades que marcan una radiografía de la situación de Argentina. Cuando tenés gobiernos con esta economía, en las capitales está la administración pública que tiene un piso, pero ciudades como Concordia, Rosario o Mar del Plata no tienen piso para caer”.

En ese marco, criticó que “le falta poquito a (el presidente Mauricio) Macri para alcanzar a (Fernando) De La Rúa, que alcanzó el 78% de pobreza en Concordia y 54% en el país, y hay que tener en cuenta que esta es la medición del primer semestre es decir que podemos estar un poquito peor todavía”.

El intendente describió además que “en Concordia hoy hay 25.000 puestos de trabajo en la zafra, y con el equipo de la Municipalidad y las instituciones se logró que se priorice el trabajo local, que sean concordienses los que trabajen en el citrus, el arándano, la madera, la nuez pecán”.

Explicó que “esto se hizo a través de normativa municipal para potenciar fuertemente el trabajo local a través de algunas normas locales que restringen que se traiga gente de afuera”, pero reiteró que “el problema no es la falta de trabajo sino que un cosechero gana 24.000 pesos al mes, trabajando 24 días al mes, y esa persona en 2015 no sería pobre pero ahora es pobre porque los alimentos cuestan más, la luz es un 1.000%  más cara. Y el problema no es la inflación, el problema es cuando la inflación supera el aumento salarial.

Justificó que “por eso la gente le picó el boleto a Macri y se va a ir en diciembre fracasado porque él mismo dijo que si no bajaba los índices de pobreza fracasaba, y llegó teniendo un 30% de pobreza y creo que se va a ir llegando al 40% a nivel nacional”.

“El problema es el elevado costo de la canasta básica y acá donde teníamos solamente un 7% de desocupación hace dos años, hoy superamos el 10% porque las industrias –que en su mayoría son electro intensivas como los aserraderos- hoy se están fundiendo y cerrando porque no pueden pagar el costo más grande que es la energía”, reiteró.

En ese contexto, Cresto recordó que “en la Municipalidad de Concordia se declaró la emergencia hace tres meses y hasta la oposición de Cambiemos decía que era una medida electoralista y realmente era porque estos datos que dio ayer el INDEC lo vemos todos los días, se sienten; se ve que quintuplicamos las partidas de Desarrollo Social para llegar a muchísimas más familias, no sólo que han perdido el trabajo sino que teniendo trabajo están pidiendo ayuda social”. “La emergencia nos permite modificar las partidas presupuestarias, frenar la obra pública y tener recursos para atender lo social”, ahondó.

En contraposición, marcó que “Concordia en la época del kirchnerismo nunca estuvo entre los primeros lugares de pobreza porque el Indec mide 31 ciudades y estas 10 ciudades que no son capitales de provincia son las que mueven el país”.

Sobre ello, analizó que “Concordia, Mar del Plata, Rosario, el Gran Córdoba, el Gran Buenos Aires son las ciudades que mueven la economía nacional; cuando a la economía le va bien, estas ciudades prosperan y empujan al país, pero cuando a la economía nacional le va mal, estas ciudades se caen y hay que atenderlas porque no viven del Estado sino que viven de la actividad primara, secundaria y terciaria. Rosario es una ciudad industrial, Concordia es una ciudad productiva y con desarrollo del turismo. Pero no se miden ciudades de Formosa, Santiago del Estero o Tucumán donde seguramente la pobreza debe ser el doble que en Concordia pero no las miden porque no son ciudades que reflejen o muevan la economía nacional”.  

“Para nosotros esto es una frustración porque sabemos que no hay provincia o municipio que se desarrolle en un país que no se desarrolla. Hasta San Luis debe estar sufriendo las consecuencias de este modelo nacional. Pero Concordia es una ciudad muy solidaria y organizada, con muchas instituciones por fuera y a la par del municipio que trabajan y colaboran para salir adelante. Hay un gran compromiso social y por eso no hemos tenido ningún conflicto social a pesar de estos índices, porque hay un gran trabajo del municipio y estamos al pie del cañón para atender cada situación y llegar a cada familia que padece estas políticas”, planteó.

Consultado sobre la asistencia desplegada para atender la crisis, sostuvo que “se está trabajando entre municipio, provincia y Nación porque más allá de las políticas erradas y el desastre económico, Desarrollo Social con nosotros ha funcionado bien, y también desde la provincia”. “Desde el municipio, quintuplicamos los recursos municipales en atención social, se destinan cinco o seis millones de pesos por mes exclusivamente a lo social, más lo que llega de provincia y Nación, y lo que hacen las instituciones como los gremios que están poniendo plata de sus bolsillos para atender a comedores y merenderos”, puntualizó.

En cuanto a la relación con el gobierno nacional, Cresto razonó que “la grieta está y va a existir siempre y en buena hora que haya diferentes formas de pensar porque hay extremos en ambos lados. Lo importante es que esos extremos no marquen los gobiernos, acá no influyen lo que son los fundamentalistas y se priorizó siempre el criterio para avanzar”.

“Hemos tenido muy buena relación con Desarrollo Social, la ministra (Carolina) Stanley y su equipo, y con (el ministro del Interior Rogelio) Frigerio que debe ser uno de los mejores funcionarios que ha tenido este gobierno, pero que está entrampado en un gobierno de fracaso y tiene una tarea titánica de aguantar arriba de un barco que se está hundiendo. Pero más allá de la relación con esas dos áreas, con las demás áreas de gobierno las gestiones no fueron fructíferas”, advirtió.

En ese sentido, ejemplificó que “el desastre que han hecho en el tema de la energía, donde nunca en la historia de la represa han hecho un saqueo como el que han realizado en Salto Grande y con la CAFESG (Comisión Administradora de Fondos Excedentes de Salto Grande)”.

“La CAFESG históricamente tenía un presupuesto igual al del municipio de Concordia; si el municipio tenía 3.600 millones, la CAFESG debería tener 3.600 millones y hoy su presupuesto es cero y hoy esos 3.600 millones están distribuidos entre los amigos de la energía pero en la región no quedó un peso, a eso hay que sumarle el aumento de la tarifa y la venta irrisoria del megavatio que hace que desaparezcan las regalías, lo que ha causado un daño enorme en la región”, concluyó.