Imagen de archivo del emprendimiento inmobiliario fluvial Amarras, que ha destruido un humedal sobre el río Gualeguaychú. A pesar del paso del tiempo, todavía no se ejecuta la sentencia judicial que ordena restaurar lo dañado.
Imagen de archivo de la laguna que llaman sanitaria de la Cooperativa de Provisión de Agua Potable de Pueblo General Belgrano y por la cual tienen denuncias por contaminación desde 2015.
El conflicto ambiental y social generado por la presencia de Amarras tuvo otro revés judicial. La sociedad espera desde hace año que se cumplan las sentencias judiciales.
El barrio fluvial Amarras sigue protegido por las autoridades provinciales y gran parte de la Justicia, en detrimento de la defensa de la vida y el ambiente.
Los procedimientos se realizaron con efectivos de la Jefatura Departamental de Gualeguaychú y con la colaboración de personal de las Departamentales Islas y Gualeguay.
“El proyecto Amarras es caso juzgado. Lo que configura un hito en la historia argentina, y también un ejemplo mundial, en la defensa del ambiente, de nuestros recursos naturales, de la salud y de la vida”, destacó Piaggio.
“Entraron tres tipos cuando estábamos durmiendo, nos apretaron contra la cama, se nos subieron encima, nos colocaron precintos para inmovilizarnos”, relató la mujer asaltada.
Esteban Vitor no descartó que haya más casos de corrupción en Enersa y adelantó que también están trabajando para romper la cartelización vinculada con el Estado.
La ex ministra de Salud de la provincia, Sonia Velázquez, contó por primera vez en un medio periodístico aspectos centrales de la violencia que le propinó José Ángel Allende y gran parte de la indiferencia del gobierno de entonces.