En un día en el que los usuarios del transporte urbano de pasajeros sufrieron el corte de servicio durante cuatro horas, por reclamo de la Unión Tranviarios Automotor por las condiciones laborales, se sucedieron distintas reuniones y se confirmó que los empresarios elevaron al Departamento Ejecutivo Municipal (DEM) un nuevo estudio de costos, para que se defina una suba del boleto.

La protesta iniciada por el gremio, que consistió en un cese de actividades entre las 9 a las 11, y desde las 18 hasta las 20, tendría un principio de acercamiento entre las partes. Este martes por la noche, empresarios y UTA volvíeron a reunirse, y el sindicato se tomará unos días para definir si continúa con la protesta, se la semana próxima.

Pero ayer se conoció que la concesionaria del servicio de colectivos urbanos en la capital provincial (Buses Paraná) elevará en los próximos días un pedido formal de suba de tarifas, con el respectivo estudio de costos, para que sea evaluado por el Órgano de Control del Sistema Integral de Transporte Urbano (SITU). La información se confirmó a Uno Entre Ríos, tras la reunión mantenida entre los responsables de las firmas Mariano Moreno y ERSA, y funcionarios municipales de la cartera de Transporte, encabezados por el secretario de Servicios Públicos Ricardo Frank.

El planteo se conoció como consecuencia de la negociación paritaria en marcha, a nivel nacional. Ante la falta de acuerdo de aumento salarial para los choferes de colectivos de los servicios urbanos del interior del país, la Secretaría de Trabajo de la Nación dictó la conciliación obligatoria hasta el próximo día 26 de junio. Para esa fecha fueron convocadas la Federación Argentina del Transporte Automotor de Pasajeros (Fatap), UTA y las carteras de Transporte de las provincias. Es que el jueves pasado hubo una reunión, sin avances: los empresarios aducen que no tienen recursos para afrontar aumentos, sin subsidios –algo que Nación no otorga– o inevitablemente debe recurrir a tarifas, como han hecho algunas localidades.

Así, Entre Ríos será convocada a ese encuentro, porque el gobierno nacional envía recursos en concepto de coparticipación, para asignar recursos a este sistema.

En el caso de Paraná, la última suba del boleto se puso en vigencia en abril: pasó de 14,85 pesos a 20 pesos, con un subsidio de 2,80 pesos para los usuarios locales, por 180 días. Sin embargo, los empresarios sostienen que ese estudio de costos está sensiblemente retrasado y desfasado, ya que el cuadro tarifario actual se dispuso a partir de costos correspondientes al mes de octubre del año pasado.

Vale recordar que UTA ya consiguió para Buenos Aires y Capital Federal, un aumento salarial del 20% al básico, más 16.000 pesos por única vez, como no remunerativo y en tres cuotas hasta septiembre.

La voz crítica del concejal Ríos

Este martes y tras la reunión que mantuvieron representantes de las firmas que tienen a cargo la concesión del transporte público en Paraná con el Secretario municipal de Servicios Públicos, Ricardo Frank, los empresarios comunicaron que "en el transcurso de la semana, presentarán una estimación de costos para solicitar una readecuación tarifaria".

En ese marco, el concejal Ríos adelantó que los usuarios de Paraná no están en condiciones de afrontar un nuevo aumento tarifario y recordó: “El último aumento fue implementado el 16 de abril, es decir hace poco más de dos meses, y no sólo que fue realizado fuera de los marcos regulatorios del Concejo Deliberante de Paraná, sino que no se tradujo en una mejora del servicio”, publicó Apf Digital.

Además, señaló que debido a que la empresa concesionaria del servicio viene atravesando problemas económicos y financieros -que la llevaron a llamar a concurso preventivo de quiebra- el Ejecutivo municipal la asistió financieramente con dos adelantos por cerca de 13 millones de pesos para que pudieran cumplir con las pautas establecidas en paritarias.

“Tanto el aumento como los préstamos no se han traducido en una mejora de la prestación del servicio; es más, este martes los choferes encabezaron una protesta por mejores condiciones de trabajo como son la instalación de cabeceras”, indicó Ríos y puso de relieve la falta de coches de reserva y el mal estado general de los móviles.

Respecto de los usuarios, Ríos fue contundente y aseguró que “un nuevo aumento en la tarifa resultaría impagable para los paranaenses”, y advirtió que “si con la readecuación tarifaria anterior hubo una merma del 13 por ciento de pasajeros, ahora será peor”.

Por último Ríos reflexionó: “Volvemos a discutir únicamente las necesidades del sector empresarial, dejando de lado las necesidades de los vecinos”.