La ONG “El Paraná No Se Toca”, junto con el refugio “Mundo Aparte” de Rosario, realizaron una presentación ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) solicitando una medida cautelar para que el “Estado Nacional tome medidas urgentes para el control y cese efectivo de los incendios que azotan el Delta del Paraná”.

La acción judicial ante el organismo consultivo de la Organización de los Estados Americanos  (OEA) que vela por la observancia y la defensa de los derechos humanos, pretende “que se garanticen los derechos humanos fundamentales a la vida, a la seguridad, la integridad psico-física y a la dignidad plasmados en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos, todos los cuales tienen  la estrecha relación con un ambiente sano, conforme la Opinión Consultiva 23/2017 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos”, se indicó en un comunicado oficial.

“Esperamos una acogida favorable de las medidas propuestas, dada las escasas soluciones efectivas brindadas por las instituciones nacionales”, señalaron desde las entidades ambientales luego de que ingresaran este miércoles la iniciativa por canales digitales.

Fundamentos

De acuerdo a la presentación que difundió el sitio ERA Verde, el objeto de la demanda se basó en virtud del reglamento de la Corte Interamericana y por el cual se pide que requiera a “la República Argentina la adopción de medidas necesarias y urgentes tendientes a erradicar los focos de incendios que azotan a los humedales asociados al Delta del Paraná, causando efectos muy nocivos a la vida y la salud de las poblaciones debiendo ser las mismas adecuadas y efectivas a fin de controlarlos, extinguirlos y prevenir nuevos focos ígneos, los que ya han arrasado estimativamente con más 400.000 hectáreas del ecosistema natural”.

“Así también solicitamos medidas tendientes al conocimiento del estado de los ecosistemas degradados y la prohibición de actividades contrarias al uso sustentable y recomposición de las áreas afectadas”, se indicó.

En el pedido también se incorporan los antecedentes del caso, y los registros documentales de los incendios intencionales en el Delta del Paraná que se vienen produciendo desde principio de año, donde se ha registrado tierra arrasada por las llamas en “más de 400.000 hectáreas a causa de las quemas, causados por los más de  37.516 focos de incendios “.

Del mismo modo se destaca las características  del “región del Delta del Paraná conforma una extensa planicie de inundación en la porción final de la Cuenca del Paraná, enmarcada entre la región pampeana santafesina, entrerriana y bonaerense”, donde “el Paraná, con sus 4.000 kilómetros de longitud, drena una superficie de 2.600.000 km2 que  comprende muy diversas regiones geológicas, climáticas y biogeográficas”.

Sobre los beneficios ecosistémicos de los Humedales del Delta del Paraná para la vida señalan que “amortiguan las inundaciones, fijan grandes volúmenes de carbono atmosférico, y mantienen la calidad del agua, controlan  la erosión y el transporte de sedimentos, aportando directamente a los procesos de adaptación al cambio climático. Igualmente, es fuente para el reciclamiento de nutrientes, incluida ‘la producción primaria por parte de las plantas y sus diversos consumidores, la descomposición, exportación de materiales al ambiente terrestre y su asimilación’. Estos servicios usualmente no son percibidos por la sociedad ni por quienes toman decisiones sobre el territorio”. Y que para “asegurar la provisión de estos bienes y servicios ecosistémicos  se requiere mantener la integridad ecológica de los humedales”.

En otro tramo, los peticionantes enumeran las distintas instancias oficiales nacionales a las que se acudió, de cuyos resultados surge que las estrategias para sofocar e impedir nuevos focos de incendios no han dado resultado. Y en referencia al puntal al reflotado Plan Integral Estratégico para la Conservación y Aprovechamiento Sostenible del Delta del Paraná (PIECAS) que “resultó totalmente ineficaz” a la luz de las definiciones de la misma Corte Suprema de Justicia de la Nación.

El Paraná No Se Toca y Mundo Aparte reiteran la gravedad, urgencia e irreparabilidad de persistir estos daños, para requerir finalmente acciones inmediatas que permitan frenar poner freno a estos daños.

Fuente: ERA Verde – Foto: Leandro Gómez