El abogado de Gualeguaychú, Luis Leissa, opinó respecto del proyecto de reforma judicial que impulsa el gobierno nacional y también analizó la realidad de la Justicia de Entre Ríos tras la suspensión del juicio por corrupción contra el ex gobernador Sergio Urribarri.

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Leissa se refirió al proyecto de reforma judicial y opinó que “viendo lo que pasó ayer con la jueza en lo contencioso administrativo de La Plata que el Senado se opuso a una precautelar y rechazó la posibilidad de no tratar –como ella había ordenado- el desplazamiento de dos jueces, es obvio que se siente mal olor”. “No escapa a las reglas generales que se quiere frenar a la justicia e introducirse en temas que no controlan con un designio claro de impunidad; este tipo de cosas no apuntan bien”.

Afirmó que “en principio esto parece que no sale bien parido, y además indudablemente el tiempo no es el oportuno; no es el momento ni la circunstancia para una reforma de este tipo porque ni siquiera están dadas las condiciones para que el ritmo legislativo y la forma en que se procesa toda la formación de una mirada común para reformar uno de los poderes del Estado estén dadas las condiciones”. “Esto es inoportuno e indudablemente  viene precedido de una serie de datos objetivos que son preocupantes. Hasta ahora el comportamiento que ha tenido la Justicia desde diciembre de 2019 en adelante no ha sido bueno”, criticó.

Como ejemplos mencionó “el proceso de liberación de presos y el proceso de reforma de AFIP para hacerle una franquicia incomprensible, injustificada e inequitativa a Cristóbal López” y en tal sentido aseveró que “no hay muchos elementos para buscar una justificación a todo esto, hay una persistencia en buscar salidas alternativas que están reñidas con las normas de la justicia y de la ética, y por más racional que sea el análisis que e haga hay que dar un no rotundo”. “Hasta ahora no hay elementos para decir que esto va bien encaminado”, sentenció.

Planteó asimismo que “el foco es en lo penal y se da en un marco donde las voces del kirchnerismo señalan una postura cerrada, hermética y casi fanática de decir que es una campaña de un sector de la prensa, lo cual no es verdad porque los hechos existieron y hasta los propios involucrados reconocieron su participación, los arrepentimientos que hubo en las distintas causas”. “No sé qué más falta para entender –a pesar de la presunción de inocencia- de que hay elementos más que convincentes para que las causas continúen, lleguen a juicio y se resuelvan. Siempre tienen que ver con aspectos penales donde están involucrados allegados a la ex presidenta Cristina Fernández”, señaló.

En el mismo sentido, apuntó que “si ponen tanto énfasis en cuestionar que declaren, que colaboren con la marcha de la justicia y que en un juicio se defina si son culpables o inocentes”. “Todas las declaraciones lo único que hacen es repudiar pero no aportan ninguna prueba contraria hasta lo que aparece como prueba de cargo”, cuestionó.

Asimismo, consideró que “si bien hay que esperar, indudablemente la apuesta del oficialismo es ampliar el número de la Corte y eso es claro, no persigue otro objetivo; no es cierto que estos proyectos busquen solución a otros aspectos, lo que se busca es licuar a ciertos sectores de la Justicia, y hay una voluntad por ampliar la Corte cuando no hay elementos sólidos para decir que este número es inadecuado”.

“Hoy hasta por un problema de tiempo político no hay nivel de consenso y esto no puede sancionarse por un ocasional número que supere a la oposición en el ámbito legislativo para que una reforma de esta índole y envergadura se realice puramente por un problema aritmético y tenemos un voto más. Como es inoportuno el tema global de la reforma judicial también hay que dejar de lado esto cuando en el país hay otros temas más graves que resolver”, refirió.

La Justicia de Entre Ríos

Respecto de las determinaciones de la Justicia de suspender el juicio por corrupción que se sigue contra el ex gobernador y actual embajador en Israel, Sergio Urribarri, calificó que “es penoso e injustificable y no tiene ningún otro sentido que no sea el de una mayoritaria voluntad de la Justicia de no meterse en esta problemática”.

“Esto pone en crisis la credibilidad de todo el Poder Judicial de Entre Ríos. La marcha de la Justicia en general está apuntando más a no meterse que a responder a los deberes que tiene el Poder Judicial”, definió.

Al respecto, sostuvo que “esto exige mayores responsabilidades en un momento donde no puede decirse que la justicia no puede marchar, porque están dadas todas las condiciones para el trabajo, y así como asumimos las ventajas de ocupar un cargo en la Justicia también hay que asumir estas pequeñas molestias que pueden ser entendibles en el marco de una sociedad como la de Paraná donde en general todos se conocen. Pero en estos casos hay que tener la entereza, la fortaleza y el equilibrio suficiente para actuar”.

“Esto de postergar indefinidamente un juicio como el de Urribarri carece de lógica, y a veces –sin querer- no se le pone el énfasis necesario y hay un acostumbramiento a este tipo de cosas, y se toma como natural que no va a pasar nada. Y además, por lo bajo, los jueces siempre están en una justificación de las cosas que no se hacen”, concluyó.