El propietario de la agencia de viajes ParanaTur de la capital provincial, Edgardo López Osuna, aseguró que la medida que tomó el Banco Central de prohibir a las tarjetas de crédito a vender viajes al exterior en cuotas “no va a durar en el tiempo”.

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), López Osuna sostuvo que “para el sector la medida era previsible porque lo que está buscando el Banco Central es detener la sangría de los pocos dólares que tiene como reserva el Estado”. “Es un manotazo de ahogado que perjudica al sector”, definió.

En ese marco, aseguró que la cantidad de dólares de los turistas que viajan al exterior “no mueve el amperímetro, y menos en esta circunstancia. En pre-pandemia era un monto importante pero ahora con el 20% de las compañías aéreas operando en Argentina y un 20% los despegues que había antes, no tiene ninguna importancia”.

Asimismo, planteó que “es muy difícil de determinar y de cuantificar, porque no se han tenido en cuenta viajes mixtos, como Mendoza-Chile o Perú-Bolivia y Argentina, donde habría una parte que se puede financiar hasta con PreViaje y otra que no”.

De todos modos, advirtió que “hecha la ley, hecha la trampa y con seguridad van a surgir alternativas. Una de ellas es que van a aparecer las financiaciones en pesos ajustable a valor dólar, que va a ser la forma para el potencial pasajero de poder financiero, aunque con el riesgo del futuro precio del dólar”.

Consultado por el modo en que la determinación afectará a las agencias de viajes, López Osuna aseveró que “ahora viene el verano y la temporada de turismo nacional será buena pero la temporada de turismo internacional para una empresa como la nuestra genera entre el 70 y el 80% del ingreso que este verano ya está cortado, ya venía mal. Por supuesto que afectará las pocas ventas que teníamos, porque la financiación es clave para nuestro sector”.

“Hay quienes tienen el poder adquisitivo para comprar viajes al exterior pero no tienen el efectivo, entonces recurren a las tarjetas que tienen buena financiación porque son internacionales de hasta 12 y 18 cuotas, y eso hace a un movimiento del turismo”, explicitó el empresario y criticó que “estos son mamarrachos que hacemos solamente en Argentina”.

Por último, sostuvo que “la normativa habla de un principio, que es hoy, pero no habla de un final. Calculo que aparecerán aclaraciones porque en ningún país del mundo te prohíben la venta en cuotas, es una norma ridícula que por alguna cuestión coyuntural se puede aceptar pero no va a durar en el tiempo”.