En su columna semanal futbolera, en el programa A Quien Corresponda, que se emite por Radio De La Plaza (94.7), el Bicho Flotta comentó en el comienzo que “la verdad es que estoy feliz por Di María y por Messi, además que se ganó un campeonato en Brasil, después de tanto tiempo, en el mismísimo Maracaná y ante el eterno rival”.

Y siguió: “No hay que olvidar que allí Messi tuvo quizás la tristeza más grande en el Mundial de 2014, en la final perdida ante Alemania, y ahora la alegría más grande en el fútbol.

Más adelante volvió a hacer foco en Messi y Di María y manifestó: “Se trata de dos jugadores muy castigados de esa generación que tuvo grandes futbolistas y que perdió varias finales. Messi aguantó de todo de un sector que le decía que era un pecho frío, le buscamos todas las vueltas y manifestaba que en las instancias finales era un jugador más”.

A lo que añadió: “La verdad es que se sacó una gran mochila de encima, ahora sí puede decir soy campeón con la selección argentina de fútbol y creo que eso se vio en la alegría que tenía”.

Enseguida el DT analizó a Messi y su influencia en el grupo: “Los años de maduración llegaron y ahora es como un padre, como un guía espiritual. Después del partido me quedaron dos cosas. Primero los jugadores corriendo hacia Messi, arropándolo y después elevándolo varias veces en el aire y lo cierto es que pocas veces pasa eso con un jugador y creo que fue un reconocimiento por todo lo que dio al fútbol argentino”.

Y agregó: “Segundo el abrazo interminable que tuvieron Messi y Scaloni y eso demuestra la unidad del grupo, sobre todo en los momentos donde fue criticado”.

A continuación todo el análisis de Rubén Bicho Flotta: